La carrera musical más que productiva de Gaetano Donizetti, con casi 70 óperas en su haber, alcanzó una de sus cumbres innegables con El elixir de amor. Se compuso en unas pocas semanas y se estrenó cuando las heridas del fiasco de su anterior ópera no tuvieron tiempo de curarse.
Sin embargo, el destino de su nueva creación sería completamente diferente: una cálida recepción en toda Europa desde el estreno, The Elexir of Love colocó a Donizetti en el podio de los compositores italianos más populares, y desde ese momento siempre jugó un papel importante en el repertorio de ópera.
El más inspirado de los pocos libretos cómicos que escribió Felice Romani motivó al compositor a dar a luz un tipo de música que, teniendo en cuenta muchos de los elementos cómicos de la tradición de la ópera cómica, no renunció a la oportunidad de proponer. Melodías que aspiran, sobre todo, a mover al público.
La poción mágica de Donizetti (o no), que trasciende el amor de Adina y Nemorinos, un amor al principio impensable y luego tan completo, exige voces portentosas para revelar su fuerza. A cambio, garantizan un viaje extraordinario sin abandonar tu asiento.